Margot Miserachi Kalach, health coach egresada del Institute of Integrative Nutrition de Nueva York, nos lleva a una realidad que perdemos de vista: “nuestro cuerpo es un sistema que está hecho para desintoxicarse de manera recurrente”, por lo que más allá de tener una rutina agresiva de detox por un tiempo limitado, un plan “inteligente” para recuperarnos debe visualizarse más allá de la cuesta de enero.
Aunque todo nuestro cuerpo trabaja en armonía para procurar que estemos y nos sintamos sanos, existen ciertos órganos en los que debemos poner especial atención, así que para quienes se encuentran en ese proceso de “recuperarse” de los excesos, aquí van los puntos de atención para limpiar los hábitos y ayudar a que el cuerpo recupere y tenga al 100% la capacidad de desintoxicarse:
EL SISTEMA DIGESTIVO
Margot, experta en salud gastrointestinal y en psicoterapia corporal, apunta que el sistema digestivo realiza una función perfecta desde la boca, el estómago, los intestinos y finalmente el colon. “Desde que ingieres un producto, al masticarlo te estás desintoxicando, porque con este proceso sacas bacterias y ciertas enzimas, esta función también la hace la saliva, por lo que al entrar al estómago también se hace una separación de los alimentos. Nuestro cuerpo tiene esa capacidad de digerir, pero debemos ayudarle en la tarea. La opción es preferir alimentos que vengan de alguna planta, quitar colorantes, endulzantes industrializados, incluso la sal y también refrescos, lácteos, alimentos con conservadores o harinas procesadas. Adhiérete a lo más natural, lo que esté más cercano a la tierra”.
EL SUDOR Y LA PIEL
El órgano más grande de nuestro cuerpo es la piel, y la forma en la que éste se desintoxica es a través del sudor. Realizar una rutina de ejercicio nos ayuda a abrir los poros y soltar las toxinas por esta vía. “Claro que también hay que cuidar el maquillaje, las cremas y hasta el perfume que usamos. La máxima es que no te untes aquello que no comerías, por lo que ocupa solamente productos de aceites naturales o de origen mineral. Incluso, tras una rutina de ejercicio, puedes ayudar a tu piel con baños de agua fría y caliente para contraer los poros”, explica Margot.
RIÑONES E HÍGADO
Nuestros órganos no trabajan de manera independiente y algunos son aliados para ayudarnos en el proceso de desintoxicación. Comer bien ayuda al sistema digestivo, pero también a los riñones que toman la función de filtrar las toxinas de la sangre a través de la orina. El hígado, por otro lado, es uno de los top en el proceso de la desintoxicación, por lo que a decir de la experta, a través de él se filtra lo que comemos, pero también lo que respiramos. “Si no tomamos agua limpia y de buena calidad, si no estamos en espacios con la temperatura adecuada o si habitamos en lugares sin plantas, todo eso cuenta”.
¿EL MEJOR CAMINO ES EL EJERCICIO?
Enero es el mes en el que los gimnasios se abarrotan. Las llegadas al centro deportivo Soulcore son frecuentes en este tiempo, ya que se trata de un espacio donde puedes quemar hasta 600 calorías en menos de una hora, con movimientos lentos que van hasta las fibras musculares, pero con bajo impacto, alta intensidad y con resultados comprobados en 12 sesiones.
La motivación es parte esencial del trabajo de los entrenadores de este lugar, donde se usa la técnica Lagree, con 300 centros en todo el mundo y sólo 5 de ellos en México, manejados por Soulcore. Los ejercicios se hacen en camas especiales llamadas Mega y Micro, las cuales están conformadas por dos plataformas unidas por un carro al centro, y resistencias que permiten trabajar todo el cuerpo. Y eso sí, para garantizar los resultados, el acompañamiento de los expertos también incluye el complemento de información nutricional.
Si ya tienes la intención de entrenarte en Soulcore, considera que será un proyecto con resultados a corto plazo, pero que demanda generar nuevos hábitos, ya que existen errores comunes en los que caemos todos aquellos que nos ejercitamos:
LA DIETA Y EL EJERCICIO
La mayoría de las personas malentienden que por realizar una rutina deportiva tienen libre albedrío para recaer en excesos. “Las personas piensan que pueden comer lo que quieran y que con el ejercicio lo queman, pero ejercitarse no es un permiso para comer mal, sino una oportunidad para mejorar las funciones básicas, incluso la salud del corazón o el nivel de presión arterial. Si comes mal no vas a contrarrestarlo con una hora de ejercicio, así que ambos deben nivelarse. El ejercicio debe acompañarse de un buen plan de alimentación”, reitera Margot.
LA FELICIDAD DEL MOVIMIENTO
Considera también que poner en movimiento el cuerpo le ayuda en cuanto al nivel de hormonas, ya que se liberan algunas que nos hacen sentir felices, y disminuimos aquellas que nos hacen sentir agobiados o con estrés. El ejercicio regula el nivel de azúcar en sangre, además nos permite dormir mejor y mejorar diversos procesos en el organismo. “Movernos ayuda a tener mejores respuestas de endorfina y serotonina y hacer las actividades más felices y contentos, esto a su vez mejora el sistema inmunológico y mantiene las defensas altas para evitar tener patógenos o contraer virus”, explica la health coach.
LAS CÉLULAS Y SU REGENERACIÓN
Como decíamos, el cuerpo se autoregula diariamente, por lo que la regeneración celular se hace de manera continua. Eso sí, el ejercicio ayuda a que estos procesos internos se realicen con mayor facilidad, por lo que con una rutina continua de movimiento y otros hábitos saludables contribuimos a que los órganos tengan mejor funcionamiento y mayor nivel de regeneración. “Es como si estuvieran mas ‘nuevos’”, considera Margot.
EL TIEMPO ES LA BASE
Por último, los expertos de Soulcore hacen hincapié en el que las rutinas de ejercicio deben ser sostenibles en el tiempo. No se debe abusar de las horas de actividad para evitar incluso las lesiones Lo ideal es que si decides iniciar hábito de ejercitarte, sepas los beneficios y la importancia de hacerlo por el bien de tu cuerpo, no por la urgencia de salir de los excesos de las fiestas de fin de año.
Fotos e información: Cortesía