Alimentos, materiales, productos de belleza y medicamentos, todos, cuando tienen un origen orgánico y natural, tienden a ser muy provechosos para nuestra salud.

Consumir frutas, verduras, leguminosas y hasta carnes que no han sido procesadas, ni tienen aditamentos químicos, es la clave para que nuestro sistema funcione de la mejor manera, al hacerlo, esto también se refleja en la salud de la piel y cabello, lo que es muy beneficioso para la belleza. De la misma manera, las hierbas y plantas curativas son una buena manera de consumir medicina de la naturaleza que resulta muy efectiva.

Y así, como cuidarnos desde lo que comemos hasta lo que usamos, es importante tener la coherencia de elegir los productos que sean de mejor calidad y eficacia. Cuidar tu vista es esencial al preocuparte por ti, por eso, en cuestión de salud visual, Similasan tiene las gotas oftálmicas perfectas para que continúes cuidándote de manera natural e integral. Están hechas con extractos de plantas y hierbas curativas que al ser combinadas entre ellas, tienen distintos efectos para sanar las aflicciones más comunes de nuestros ojos. 

Sus cuatro presentaciones serán la mejor opción para ti dependiendo de lo que necesites, ojo rojo, ojo cansado, ojo alérgico y ojo seco.

Fatifix: con Cineraria Maritima. Natrum Chloratum y Ruta, que ayudarán al tratamiento de síntomas como cansancio ocular, ardor, irritación y enrojecimiento por esfuerzo intensivo en los ojos.

Namidafix: con Apis mellifica, Euphrasia y Schoenocaulon officinale. Serán auxiliares para tratar la alergia con irritación ocular, irritación de párpados, mucosas oculares, enrojecimiento, hinchazón, picazón y sensación de ardor.

Vermelfix: contiene una mezcla de Belladonna, Euphrasia y Hepar Sulfur que ayudan a sanar el enrojecimiento ocular, lagrimeo excesivo, sensación de arena en el ojo, irritación, sequedad y ardor.

Secsim: su fórmula está compuesta por Belladonna, Euphrasia. Mercurius Corrosivus. Que son ideales para tratar la sequedad ocular, enrojecimiento de ojos y párpados, lagrimeo, sensación de arenilla y sensibilidad a la luz.

Definitivamente la salud se debe cuidar de adentro hacia afuera, no olvides que tu vista es fundamental para poder seguir disfrutando de las maravillas que la naturaleza tiene para nosotros.

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Fotos e información: Cortesía