Es hablar de historia, de raíces profundas, de arte vivo y tradiciones que siguen latiendo con fuerza. Y sí, también es hablar de una de las fiestas más emblemáticas de nuestro país: la Guelaguetza.
Este 21 y 28 de julio, Oaxaca se llena de ritmo, trajes tradicionales, música, danzas y un espíritu de comunidad que contagia. La Guelaguetza es el reflejo de la diversidad y riqueza cultural de los 16 pueblos originarios y del pueblo afromexicano, que comparten con orgullo lo que los hace únicos.
Y si algo distingue a este gran festejo, es la manera en la que las mujeres oaxaqueñas brillan con su indumentaria tradicional y joyería artesanal, herencia de generaciones. Piezas que no solo adornan, cuentan historias. Que conectan con lo más profundo de nuestras raíces.
Ahí es donde entra Oro de Monte Albán, una firma que no solo hace joyas, sino que preserva un legado ancestral. Cada una de sus piezas está inspirada en el arte prehispánico y elaborada con técnicas tradicionales que mantienen viva la memoria de quienes nos antecedieron.
Entre sus colecciones más icónicas está la línea "cascabel prehispánico", una pieza que evoca fuerza y elegancia, convertida en collares, aretes y pulseras con detalles en rubíes o perlas, trabajadas en oro o plata. Ideales para lucir con orgullo durante la Guelaguetza —o en cualquier momento en el que quieras sentirte conectada con tus raíces.
Otra joya con historia es el "águila que cae", inspirada en la figura de Cuauhtémoc, el sol en el ocaso, y basada en uno de los hallazgos más importantes de la arqueología mexicana: las ofrendas de la Tumba número 7 de Monte Albán. Un diseño que fusiona arte, historia y maestría oaxaqueña.
¿Lo mejor? Oro de Monte Albán es el único taller de joyería en Oaxaca avalado por el INAH para crear reproducciones oficiales de piezas prehispánicas, usando técnicas como el vaciado a la cera perdida. Puedes encontrar sus piezas en sus boutiques de Oaxaca, en la zona arqueológica de Monte Albán, y en CDMX, en el Centro Histórico (Palacio de los Condes de Miravalle - The Shops DownTown).
Así que, si vas a vivir la Guelaguetza 2025, o simplemente quieres llevar contigo un pedacito de Oaxaca, hazlo con arte, con historia… y con mucha identidad.
Porque en cada joya de Oro de Monte Albán, late el corazón de una cultura que sigue brillando.
Fotos e información: Cortesía