Septiembre 20, 2024

Cada variedad de uva tiene sus propias características, es decir algunas requieren de un periodo de maduración más largo que otras, muchas necesitan de mayor cantidad de rayos de sol para tener una mejor madurez fenólica, a otras les cae muy bien una amplia oscilación térmica para que sus aromas afloren de mejor manera, hay otras que se dan mejor a cierta altura y otras que prefieren crecer a nivel del mar. En fin, cada variedad tiene diferentes expresiones dependiendo del lugar donde se encuentre plantada; si bien mantiene las expresiones propias de su variedad en cuanto a su tanicidad, aromas, color, éstas se ven un poco modificadas en función de las características climatológicas, del suelo y subsuelo, de la cultura, de su terroir.