La diabetes tipo 1 (DT1) está definida como una enfermedad autoinmune, en la que, a grandes rasgos, los propios anticuerpos atacan a las células beta del páncreas, que son las encargadas de producir la insulina que regula la glucosa en sangre. Lo que se sabe hasta hoy de la DT1 es que no tiene cura, no es prevenible y aunque suele diagnosticarse en edades tempranas (por eso también se le conoce como diabetes infantil o juvenil) se puede presentar a cualquier edad.