Tener imperfecciones puede generar ansiedad y afectar directamente a nuestra autoestima, así que muchas veces cometemos el error de pellizcarnos con la idea de que, al hacerlo, estos desaparecerán; sin embargo, está comprobado que el pellizcarnos puede infectar los poros y provocar que los brotes aumenten e incluso se extiendan.